lunes, 2 de mayo de 2011

¡SI SE PUEDE!


2 Crónicas 1 y 2
Llegado el momento nos enfrentamos a retos que parecen mas grandes que nuestras posibilidades o capacidades; esto nos hace sentir temor, angustia, también podemos sentirnos pequeños ante tal empresa y sumamente vulnerables.
En situación similar estaba Salomón cuando ascendió al trono, tenía dos grandes retos: reemplazar nada más y nada menos que al rey David y construir el templo de Dios en Jerusalén.

¿Cómo es que Salomón salió adelante? Cuando el joven rey ascendió al trono, en realidad no tenía la menor idea de cómo empezar, pero recordó que la condición para recibir la ayuda de Dios era tomar a Dios como padre y asumirse a si mismo como hijo de Dios. Con esto en mente, el nuevo rey convocó a todo su gabinete y a sus oficiales para irse de retiro a Gabaón, donde adoraron ofreciendo mil holocaustos. Gabaón era el lugar de adoración donde se encontraba el tabernáculo de reunión desde tiempos de Josué.
Narra el relato bíblico que en esos días dedicados a adorar, Dios apareció en sueños a Salomón y le dijo: “Pídeme lo que quieras que yo te dé.” V.1:7. Salomón aprovechó este diálogo con Dios, le expresó sus temores diciéndole que se sentía demasiado joven para ser rey y hace la petición clave: “[…] Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque, ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?” V.1:10. La respuesta de Dios no se hizo esperar; no solo le concedió sabiduría, sino también riquezas, bienes y gloria.
Con esa confianza que Dios le daría las capacidades para desempeñar su tarea y sobre todo, que el Señor estaría con él, “Determinó, pues, Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y casa para su reino. “ V.2:1. El templo o casa para Dios debería ser magnífica, de la mejor cantera, forrada de la mejor madera y cubierta de oro en su interior, entre otras cosas; para esto, Salomón hace un inventario de los recursos disponibles para tal obra, se da cuenta que los israelitas eran expertos en la agricultura, pero no en metalurgia ni en construcción; así que recurre a Hiram rey de Tiro para obtener de ellos madera de la mejor calidad, mano de obra de calidad y un experimentado director de obra. Con esto, todo estaba listo para iniciar la construcción.
Para aplicar a nuestras vidas:
• Si Dios te escogió para esa tarea, el te dará los recursos y la capacidad.
• Ser hijo de Dios es clave, “mas a todos los que le recibieron [a Jesucristo], les dio potestad [derecho] de ser hijos de Dios” Juan 1:12. Todos somos creaturas de Dios, pero no todos hijos.
• Salomón inició con el pie derecho: adorando a Dios en comunidad, le dio la gloria al Señor junto con su pueblo. Adoremos en comunidad.


TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I.G.

viernes, 29 de abril de 2011

"CONTAGIEMOS LA VISIÓN"

1 Crónicas 29

Hay ideas sumamente brillantes que se quedan solo en eso, ideas. Pero cuando somos capaces de plasmarlas en un proyecto, para que a partir de este, contagiemos a todos los que tengan que intervenir y logramos materializar tal idea, es cuando realmente transformamos nuestra vida personal, de nuestra organización o comunidad.
Retomemos el caso del proyecto de la construcción del primer templo de Jerusalén, David tuvo esta idea, luego se la comunicó al profeta Natán, Dios le manda un mensaje a David diciéndole que acepta la idea, pero que no le tocará a David culminar este proyecto, sino que será su hijo Salomón quien ejecute la obra.
David, no se desanima, al contrario, dedica muchos esfuerzos en transmitir y animar a su hijo Salomón para abrazar tan magnifico plan; David hace el proyecto arquitectónico plasmándolo en planos; con el proyecto en mesa, se da una idea de todos los recursos necesarios y comienza a realizar los preparativos.
Reunió gran cantidad de materiales, dinero y mano de obra; pero se dio cuenta que no era suficiente, entonces recurrió a todo su gabinete, a sus oficiales de gobierno y los convence para apoyar a Salomón. Este fue un gran logro, pero aun no era suficiente, el proyecto era de tal magnitud que se requería del apoyo de toda la nación; es admirable el entusiasmo de David, pues convoca al pueblo y les pide apoyo, no solo moralmente, sino en contribuciones económicas. Dice la escritura “Y se alegró el pueblo por haber contribuido voluntariamente; porque de todo corazón ofrecieron a Jehová voluntariamente” V.9, con esto, ya no se trataba solo de un proyecto familiar ni de gobierno, sino un gran proyecto nacional donde todos participaban con alegría. Empezando con el rey, quien había dispuesto parte de su fortuna personal para tal fin.
El relato bíblico nos narra que el pueblo se reunió para la coronación de Salomón como próximo rey y para entregar estas ofrendas: oro, plata, bronce, hierro, madera, piedras preciosas, etc.; pero sobre todo, para adorar a Dios. En este evento David hace una preciosa oración a Dios, de la cual quiero rescatar un fragmento: “Ahora pues, Dios nuestro, nosotros alabamos y loamos tu glorioso nombre. Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos.” V. 13 y 14
Conclusiones:
• Demos ofrendas y diezmos con alegría y con voluntad, es un gran privilegio colaborar con los proyectos de Dios. Además, nada es nuestro, solo devolvemos un poco de todo lo mucho que nos da.
• Muchas ideas brillantes, en realidad no son nuestras, vienen de Dios, como el caso de David y el templo. Si vienen de Dios, hay que darle para delante.
• Por más grandiosa que sea una idea, no sirve para nada; al menos que se convenza a todos los actores participantes, se eche a andar y se concrete hasta el final.


TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I.G.

"QUIERO SER COMO MI PAPÁ"

1 Crónicas 28

El ejemplo de los padres, es probablemente el factor que más influye en lo que somos y como somos en nuestra vida actual. De muy pequeños nos queremos parecer a ellos, ’Mami, ponme una corbata como mi papa’; ya más grandes, que vemos cosas que no nos gustan, podemos decir lo contrario, ‘Cuando sea grande, yo no seré… como mi papá’.
Sea como sea, nuestros padres son nuestros primeros y más fuertes referentes para lo que queremos imitar o evitar; así como nosotros nos t
ocará ser el factor determinante para nuestros hijos, llegado el tiempo.
Veamos el ejemplo de David y su hijo Salomón, David era el rey, así que Salomón, su hijo no se salvó de ser príncipe; desde ese hecho, su existencia fue marcada; además de eso, fue elegido sucesor al trono, así que él sería rey, como su padre.
David no pudo realizar el sueño de construir el templo, así que depositó en su sucesor la tarea de continuar y realizar aquel sueño. Cualquier semejanza con la vida real no es mera coincidencia, así somos los seres humanos. Pero en este caso vemos palpablemente el factor divino, el factor Dios, el cual cambia la posible frustración de David, en una aceptación del hecho de no poder realizar la obra, en vez de eso, transmite la visión a su hijo, lo prepara y dedica buena parte de sus esfuerzos a recolectar material y dinero para la obra magna.
Por su parte, Salomón no tomo esta tarea como una imposición de su padre, sino que al darse cuenta de que el templo era parte del plan de Dios, el joven príncipe integró este proyecto familiar como parte de su misión de vida. De hecho, la construcción del templo fue de lo mejor que hizo Salomón en toda su vida, no por la obra arquitectónica, sino por el significado y el impacto espiritual que tuvo este lugar para la vida nacional, e incluso para la humanidad. Hablando en términos políticos, la edificación del templo fue una muestra la continuidad un plan de gobierno iniciado por David décadas atrás, contribuyendo de esta manera la unidad y estabilidad nacional.

Reflexiones:
• Podemos pensar que con nuestro nacimiento se empezó a escribir una nueva historia; sin embargo dicha historia no es tan nueva, más bien es la continuación de dos: la historia de un hombre y la historia de una mujer que convergieron por un breve fragmento en el tiempo y el espacio.
• Tu vida tiene un propósito, para cumplirlo con satisfacción es importante armonizar tres cosas; tú historia familiar, tu propósito y la voluntad de Dios; en caso contrario podrías encontrarte luchando contra tu propio pasado o contra Dios.
Vamos a quedarnos con las siguientes palabras que David dijo a Salomón, que son palabra de Dios para nosotros: “Anímate y esfuérzate, y manos a la obra; no temas ni desmayes, porque Jehová, mi Dios estará contigo; él no te dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.” V.20


TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I.G.

miércoles, 27 de abril de 2011

¡YO QUIERO TENER UN GOBIERNO ASI!

1 Crónicas 27

¡Como me gustaría tener en mi país, en mi provincia y ayuntamiento un gobierno dirigido por Dios! Donde la asignación de cada puesto de mando fuera consultado con el creador. Donde los funcionarios estuvieran para servir al pueblo y no para servirse a sí mismos. Donde el caso de la viuda y el huérfano fuera atendido con buen juicio y misericordia.

¿Habrá existido en la historia de la humanidad algún sistema de gobierno como el que se anhelo? El capítulo 27 del primer libro de las crónicas registra la organización del reino de David, el cual sin lugar a dudas se acercaba por mucho al gobierno ideal.
En este reino, el máximo gobernante había sido elegido por Dios. David fue ungido para ser el rey de Israel, los líderes del pueblo reconocieron que el Señor estaba con él, vieron en él cualidades para ser el máximo gobernante de su patria y terminaron coronándole rey. ¿Ahora, por qué fue el elegido de Dios? Dice la escritura que David era un varón conforme al corazón de Dios, tenía como principio rector de su vida el consultar a Jehová antes de tomar decisiones trascendentales. Podemos entonces estar seguros, que el aparato administrativo creado por David fue guiado por Dios;, este hombre fue un estadista brillante, muy capaz y con un genio militar sorprendente; pero su máximo acierto fue buscar la guía y la ayuda de Dios para construir su reino.
¿Cómo estaba estructurado el gobierno de David? Tenía un ejército regular de 288,000 soldados, organizado en 12 divisiones de 24,000 guerreros al mando de 12 hombres leales y capaces, quienes a su vez eran asistidos por oficiales militares por cada 1000 y 100 efectivos; además contaba con oficiales sobre las tropas de reserva. Además de los militares, tenía oficiales civiles, como el tesorero de la casa real, el tesorero del reino, varios ministros de ganadería y agricultura especializados por tipo de producto, administradores de almacenes y un grupo de consejeros formado de hombres sabios, escribas y sacerdotes. Todo esto, además de los 4,400 de gobernadores mencionados en el capítulo anterior, los cuales además de llevar cuestiones civiles, instruían al pueblo en el conocimiento de Dios.
Este periodo de la historia bajo la monarquía de David, fue la época de oro del pueblo de Israel en los aspectos económicos, militares, sociales, y por supuesto, en el aspecto espiritual; por lo que este reino es la figura referente del bienestar y justicia del futuro reino de Dios bajo la autoridad de Jesucristo.
Reflexiones:
Tener un buen gobierno no depende de que sea capitalista, socialista o monarquía. Se requiere que tanto los gobernantes y los gobernados busquen la dirección de Dios, para que él indique como hacerlo.
El reino no surgió espontáneamente, el equipo de trabajo fue formado bajo una misma visión durante los 40 años de liderazgo de David.
Oremos por los gobernantes que ya tenemos. Empecemos a elegir líderes que vivan una vida guiada por Dios. Busquemos al Señor en esta época tan difícil para nuestros pueblos.

TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I.G

martes, 26 de abril de 2011

"SI SIRVES ¡SI SIRVES!"

1 Crónicas 26

Hay ciertas labores a veces consideramos de segunda categoría, me refiero a las labores de servicio, como realizar la limpieza, cargar cosas, vigilar el acceso a una puerta, etc.; cosas que la mayoría de la gente no quiere realizar; sin embargo, cuando las realizamos con alegría, nuestro carácter y espíritu se ven fortalecidos.

En el capítulo anterior, vimos que los músicos en el templo de Jerusalén desempeñaban una muy importante labor, seguramente envidiada por muchos; sin embargo, para Dios las labores del servicio se encuentran en la misma categoría que todas. Muestra de eso es que el cronista investigó quienes fueron los porteros o vigilantes en el templo y registró sus nombres junto con los músicos y junto con los ministros de estado del reino de David.
No cualquiera podía desempeñar con excelencia la labor de vigilante de portero en el templo, se requería aptitud y actitud. Entre estos trabajadores destacan los hijos de Obed-edom, de los cuales dice la escritura que eran hombres robustos y fuertes para el servicio; los porteros eran los encargados de vigilar el acceso a los lugares de adoración, por lo que debían tener buena educación para tratar a la gente y ser versados en los estatutos de la palabra de Dios para poder orientar adecuadamente a los adoradores. El cronista no pasa por alto que Obed-edom y sus hijos fueron grandemente bendecidos por Dios debido a la diligencia en su servicio.
Además de las aptitudes propias de un buen vigilante, los porteros podían aportar un valor agregado a su labor, como lo es el caso de Zacarías, hijo de Selemías quien dice la biblia que era un consejero entendido. Este hombre seguramente fue usado tremendamente por el Señor para dar palabras de aliento y dirección a muchas almas en necesidad.
Es importante recordar que Dios había escogido la tribu de Leví para que le sirviera a Él y a la comunidad, así que los músicos y los porteros de los que hablamos eran levitas. En su reino, David reorganizo a los levitas para un mejor servicio, a cada uno se le asignó trabajo de acuerdo a sus capacidades, ellos también fungían como almacenistas de los utensilios sagrados y de las provisiones del templo; también resguardaban el tesoro de la casa de Dios, y fungían como gobernadores en todo el país, “los cuales el rey David constituyó […] para todas las cosas de Dios y los negocios del Rey”. V.32
Reflexionemos:
• No menospreciemos las labores de servicio, pues a través de ellas llevamos bendición a otros, somos útiles y aprendemos humildad.
• Todos tenemos un lugar en el reino de Dios, no dudes que el Rey te ha dado grandes aptitudes para servirle, otras las adquirirás, pero la actitud depende de ti.


TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I. G

lunes, 25 de abril de 2011

"EL PODER DE LA MÚSICA"

1 Crónicas 25
Se dice que la buena música calma a las fieras, que estimula el crecimiento de las plantas. Estudiosos afirman que la música clásica estimula la creatividad, que los pianistas que ejecutan a Bach ejercitan ambos hemisferios a la vez y que esto les beneficiará en la conservación de la memoria y agilidad mental en la vejez.
Es indudable que oír y ejecutar buena música es beneficioso para la salud; también es cierto que la música también puede ser perjudicial, por ejemplo, ocasiona sordera cuando se escucha a altos decibeles; o puede estimular ideas suicidas y sentimientos depresivos.

Existe algo poderoso en la música, difícilmente la música pasará desapercibida a nuestro organismo, por lo menos nuestros tímpanos empezarán a funcionar y nuestra piel, aunque sea de manera mínima, será estimulada por las ondas sonoras. Ahora bien, si la música tiene efecto en nuestro cuerpo y nuestras emociones, también tendrá un efecto poderoso en nuestro espíritu. Estoy seguro que la música tiene mucho de espiritual, ya que la biblia nos enseña que los humanos no inventamos la música, Dios la inventó y desde antes que el hombre existiera, los ángeles alababan a Dios con música.
En el capítulo 15 del primer libro de Crónicas nos muestra cuan importante era el ministerio musical en el culto a Dios en los tiempos del rey David, había 4000 músicos que participaban en la alabanza a Jehová, ellos eran dirigidos por 288 expertos en este arte, divididos en 24 grupos de 12 integrantes cada uno. Al frente de todo este impresionante grupo de artistas, estaban Asaf, Jeditun y Hemán, los cuales los dirigían para desempeñar sus dos funciones principales:
1. Profetizar. Profetizar no necesariamente es predecir el futuro, profetizar es la proclamación de la verdad de Dios a los seres humanos.
2. Exaltar el poder de Dios. Es decir, la acción del ser humano expresando su reconocimiento a la grandeza del creador.
Esta generación de músicos fue irrepetible, solo de imaginar un ensayo de David, Asaf, Hemán y Jedutún, cantando y ejecutando juntos, quizá montando un nuevo salmo, me llena de inmensa emoción. Ellos nos siguen enseñando el papel trascendental de la música y nos llevan a reflexionar:
• ¿Tu música te ayuda a tener una buena salud física, mental y emocional? ¿Contribuye para tu salud espiritual llevándote a una comunión con el creador, o es un estimulante más para pecar?
• ¿La música que se practica en tu iglesia cumple con su razón de ser? Es decir, ¿realmente proclama las verdades de la palabra de Dios para el presente, pasado y futuro; y exalta el nombre de Dios?
• La música tiene un efecto poderoso tanto en nuestra vida personal, como en la vida de tu comunidad de fe, por lo tanto debemos utilizarla de la mejor manera para que se traduzca en grandes bendiciones.


TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I. G.