"PENSANDO EN GRANDE"

1 de Crónicas 4
Algunas personas piensan que no es bueno orar pidiendo a Dios abundancia, pues consideran que eso es actuar con egoísmo, mientras otros se la pasan solo pide y pide.
Dicen que todos los extremos son malos, estoy de acuerdo, pero veamos la historia de Jabes, alguien que pidió mucho y Dios se lo dio.
No cabe duda que Judá fue ilustre entre los patriarcas, pues el cronista dedica el capítulo 4 nuevamente a Judá, aunque ya había abordado la genealogía de este personaje en el capítulo 2. Esta vez se aboca en detalle una línea genealógica donde llaman la atención dos de sus descendientes: Caleb, hijo de Jefone y Jabes.
Centrémonos esta ocasión en Jabes, veamos en solo dos versículos, la historia de un hombre que fue ilustre porque se atrevió a pedir a lo grande y a pedir correctamente.
Dice 1 de Crónicas 4:9 y 10 “Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes, diciendo: Por cuanto lo di a luz en dolor [hebreo oseb, "dolor"]. E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que pidió. “
¿Porque razón Dios le concedería el éxito y el crecimiento que pidió en todas sus empresas? Pues Jabes pide la intervención directa de la mano de Dios en su favor, y Dios se la concede, ¿Por qué a Él sí y a otros no?
Veamos nuevamente la oración, a la que me permito poner puntos suspensivos: “¡Oh, si me dieras bendición…, y ensancharas mi territorio…, y si tu mano estuviera conmigo…, y me libraras de mal…!”.
Con los puntos suspensivos podemos apreciar más claramente que esta oración no solo se trata de pedir, sino también se aprecia un compromiso, un voto, y más que todo, un propósito trascedente en el trasfondo de cada petición.
Conclusión: Oremos a Dios, pidiendo en grande, pero pidamos cosas que contribuyan para cumplir los propósitos de Dios divino. “¡Oh, si me dieras bendición, yo…! ¡Y que tal si aumentas mi círculo de influencia, para…!”

Transformados para servir
Josías I.G.